Canada Rare Earth Corporation (CREC), empresa que cotiza en la bolsa de Vancouver, tiene la intención de poner en marcha un proyecto para procesar 70 millones de toneladas métricas de residuos acumulados en la mina Bom Futuro, en Rondônia, que contienen elementos de tierras raras, casiterita, circón e ilmenita. Además, la empresa debe explorar un área de 9.960 hectáreas donde se encuentran las pilas de residuos y estudia adquirir y explotar otras zonas en las proximidades.
El anuncio fue hecho por el COO de CREC, Peter Shearing, que hizo una presentación de los planes de la empresa al gobierno de Rondônia. La inversión a realizar se estima en R$ 1,5 mil millones y el emprendimiento deberá generar 300 empleos directos y 4,5 mil indirectos.
Situada en Ariquemes, a unos 200 km al sur de Porto Velho, la capital del estado, Bom Futuro está considerada la mayor explotación minera a cielo abierto del mundo. La zona fue descubierta en 1987 y a partir de entonces comenzó una carrera por extraer casiterita, un mineral de estaño. En los primeros años de actividad, la zona concentró a más de 15 mil mineros. Más tarde, la zona pasó a manos de Ebesa (empresa creada por Paranapanema, Cesbra y Oriente Novo). En 1998, la escasez de mineral y la crisis del precio del estaño, que llegó a US$ 5 mil la tonelada (hoy en la LME supera los US$ 40 mil/t), las empresas abandonaron el negocio y el área pasó a manos de una cooperativa, Coopersanta, que posee los derechos de exploración en la zona.
Con proyectos en Norteamérica, el Caribe, Sudamérica, África y el Sudeste Asiático, CREC está desarrollando un negocio integrado con la industria mundial de tierras raras a través de una cadena de suministro que conecta las operaciones mineras con los procesos de concentración para la separación de tierras raras, las instalaciones de refinado y los principales clientes internacionales.
